Lo confieso, todos me lo advirtieron. La realidad estaba
frente a mis ojos, era imposible no verlo. Estaba más que claro, lo
entendía. Estaba más que ciega, creían todos. Sabía que las cosas no iban a ser
como yo quería. Sabía que si seguía me iba a caer, pero cerré los ojos y seguí
caminando. Tal vez por momentos quise ignorar la realidad, quise creer que
podía engañarme a mí misma. Pero que nada iba a cambiar, que nada podía ser
perfecto, era algo imposible de negar. Hay personas que necesitamos
tropezar, que por mucho que nos lo adviertan, tenemos la necesidad de
arriesgarnos para comprobar los resultados por muy obvios que parezcan.
Necesitamos caer, incluso más de una vez, solo porqué es la única manera de ver
las cosas justamente como son.
4 comentarios:
Siempre digo que los tropiezos son importantes. pues nos ayudan a crecer! linda la entrada es preciosaa.
Siempre necesitamos equivocarnos para darnos cuenta de que estabamos equivocados, los humanos siempre cometemos el mismo error repetidas veces, porque no equivocarnos sabiendo que estamos equivocados. bonita entrada!
De los errores se aprende, nunca olvides eso! Tienes un blog precioso :D Te pasas por el mio? :)
Lindo tu blog te sigo :), http://tramosefervescentes.blogspot.com/
Publicar un comentario